New approaches to forest management
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PAIDEIA XXI
El paradigma social dominante que
enfatizaba el crecimiento económico,
control de la naturaleza, fe en la
ciencia y la tecnología, amplias
reservas de recursos naturales, la
sustitución de los recursos y el papel
dominante de los expertos en la toma
de decisiones ha cambiado a un nuevo
paradigma ambiental incluyen al
desarrollo sostenible, la armonía con
la naturaleza, el escepticismo hacia las
soluciones cientícas y tecnológicas,
el reconocimiento que los recursos
naturales son nitos y que existen
límites a la sustitución y un fuerte
énfasis en la participación pública en
la toma de decisiones.
Quiere decir entonces que el nivel
de reexión en el Perú en el sector
productivo forestal no está siguiendo
las discusiones internacionales sobre la
necesidad de favorecer una perspectiva
que considere la perspectiva de los
múltiples valores de la sociedad que
no se quedan únicamente en el interés
maderero. Habría que reexionar por
qué hasta ahora no se ha logrado
resolver con éxito que el desarrollo
forestal sostenible además de una
meta sea una realidad.
Ampliando la comunidad moral
Actualmente se ha incorporado en
el debate el carácter sintiente de los
animales superiores (Rincón, 2018) y
el reconocimiento de la sensibilidad
de las plantas. Desde una perspectiva
cientíca se encuentra ahora que las
plantas son seres que poseen hasta
quince sentidos, perciben la realidad,
tienen la capacidad de aprender y
tomar decisiones, resolver problemas,
generar respuestas adaptativas,
comunicarse con otras plantas y
animales, reconocer a sus parientes e
incluso manipular a los animales en
benecio de su propia reproducción
(Marin-Loaiza & Céspedes, 2007;
Mancuso & Viola, 2013; Gonzáles,
2016; Mancuso, 2015; Fajardo & de
Brito, 2017; Croeze, 2018).
La ciencia está demostrando cada
vez con más evidencia que las plantas
desarrollan los medios para comunicarse,
protegerse y adaptarse al entorno.
Gorzelak et al. (2015) consideran a
la red de micorrizas como ecológica y
evolutivamente signicativa debido a
sus efectos positivos sobre la aptitud
de las plantas y hongos miembros. La
evidencia muestra que esta red inuye
en la supervivencia, el crecimiento,
la siología, la salud, la capacidad
competitiva y el comportamiento de
las plantas y los hongos vinculados
en la red. Cada vez más se comprende
que la red de micorrizas permite una
comunicación planta-hongo-planta, y
puede implicar señalización bioquímica
(Song et al., 2010; Babikova et al.,
2013 citados por Gorzelak et al., 2015),
transferencias de recursos (Francis &
Read, 1984; Simard et al., 1997a, b; He
et al., 2009; Teste et al., 2009 citados por
Gorzelak et al., 2015) o señales eléctricas
impulsadas por el potencial de acción
(Baluska et al., 2006; Kai et al., 2009
citados por Gorzelak et al., 2015). Las
respuestas de las plantas y los hongos
a est
a comunicación son rápidas