Hermeneutical assessment of learning
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PAIDEIA XXI
INTRODUCCIÓN
En el contexto de la enseñanza
universitaria, la calidad puede
valorarse según la trascendencia
de las investigaciones, cuyos
resultados expresan etapas de
cambios o valoraciones hacia una
cultura de principios sostenibles
(Too & Bajracharya, 2015; Adams
et al., 2018), donde debe primar la
implicación de desarrollo interno como
único aval hacia la conformidad en la
toma de decisiones (Disterheft et al.,
2016), además, de la participación y
las opiniones de los grupos de interés
para sí, contribuir con espíritu de
cambio (Turan et al., 2016).
La UNESCO (2005) indicó la
necesidad de aprender y medir el
aprendizaje basado en el rendimiento
de pruebas estandarizadas; sin
embargo, la transformación de
modelos tradicionales requiere ser
implementada como garantía de la
calidad en la enseñanza (Hargreaves,
2010) y luego, que resulte trascendente
tal y como lo establece la Agenda de
Desarrollo Sostenible 2030 (WEF,
2015).
Cuando se desea realizar un
análisis sobre la calidad de la
enseñanza, no basta solo preguntar
a los docentes sobre lo que considera
del conocimiento conceptual y
procedimental de los estudiantes,
también resulta ineludible realizar un
enfoque estructural de escenario en
los estudiantes para valorar lo que se
imparte (Klug et al., 2013; Kaiser et
al., 2017).
Los estudiantes al ser el grupo
más numeroso en las universidades,
éstos signican la expresión directa
e impacto del conocimiento ante la
motivación generada (Emanuel &
Adams, 2011; Cotton et al., 2016; Ting
& Cheng, 2017).
Las habilidades en los estudiantes
y sus actitudes para responder a los
retos del presente y probables futuros
depende sí, el ejercicio de la educación
realmente presenta calidad (Yuan et
al., 2013; Buckler & Creech, 2014).
Garantizar el desarrollo de la misión
educativa en el contexto universitario
por compromisos declarados y
rmados (Lozano et al., 2015),
requiere mostrar políticas sostenibles,
planes de estudios e investigaciones
visibles y programas de extensión
reconocibles (Dagiliūtė & Liobikienė,
2015; Beynaghi et al., 2016).
A pesar de lo planteado, la
instrucción del docente parece decisiva
en la comprensión del aprendizaje
donde las evaluaciones resultan las
guías o señales para indicar, cuáles
rutas tendrían que continuarse
en el proceso de la enseñanza de
manera que, implícitamente está la
reducción sobre la incertidumbre
cuando se muestra desconocimiento
en los estudiantes (Thiede et al., 2015;
Witherby & Tauber, 2017).
Los procedimientos y el dominio
de conceptos son claves en el proceso
del aprendizaje (Rittle et al., 2016),
es decir, la capacidad de ejecutar
acciones secuenciales para resolver
un problema, es dependiente del
conocimiento sobre procedimientos
(Crooks & Alibali, 2014) pero una